La comunidad de Siloé de los barrios Belén y la Nave y nuestros colaboradores de las sedes del Valle del Cauca – Colombia recolectaron más de 100.000 tapas plásticas para contribuir a la construcción de un sueño en forma de mural.

¡Superamos la meta! Sí, una tapita sumó

Una a una se fueron sumando las tapitas de diferentes tipos de botellas que en otra ocasión probablemente hubiesen podido terminar en la basura, pero en este caso unimos nuestros esfuerzos para hacer realidad el anhelo de una comunidad que quiere ver reflejados sus valores en un mural completamente reciclado.
Durante cuatro meses, en botellones de agua, costales, bolsas, cajas y demás nos fueron llegando cientos de tapas hasta lograr y superar la meta que nos habíamos propuesto en el principio de esta jornada. Niños, jóvenes y adultos, desde la escuela de fútbol del barrio hasta la panadería y nuestros colaboradores en los casinos de nuestras sedes, contribuyeron para que juntos hagamos las cosas bien por Siloé.
Nos sentimos orgullosos y motivados porque gracias al compromiso de todos quienes aportaron al menos una tapita cada vez vemos más cerca la materialización de una obra de arte cargada de sentido e ilusiones.

Un poco de cómo nació el mural…

Este proyecto nace a partir del estallido social del 2021, en la búsqueda de representar la unión, la fortaleza y el empoderamiento de las personas de la comunidad de Siloé que en medio de las dificultades y a través del diálogo han consolidado un tejido social inquebrantable.
Una tapita suma es la analogía que hacemos para decir que cada persona cuenta, cada pequeña acción por insignificante que parezca, al unirse con otras que apuntan hacía el mismo objetivo permiten crear cosas grandes. Hoy estamos en el proceso de construcción de este mural y esperamos que sea la motivación para que muchos otros proyectos se consoliden aquí y en cualquier parte del mundo.